Izquierda abertzale: con la boca dicen defender a los trabajadores; con el brazo, les matan

De nuevo, un atentado. De nuevo, un muerto. De nuevo, un nombre: Juan Manuel Piñuel Villalón. Y por supuesto, mi más enérgica condena y mi solidaridad con la Guardia Civil, que ha recibido su tercer golpe mortal en pocos meses, y que parece que se ha convertido en el objetivo de los asesinos.

Y una reflexión. Los terroristas de ETA han matado en los últimos meses a seis trabajadores, casi todos emigrantes. Los dos primeros, Carlos y Diego, dos inmigrantes ecuatorianos que habían venido aquí a trabajar y a sacar a sus familias de la miseria. Los dos siguientes, Raúl y Fernando, dos trabajadores desplazados a Francia por motivos de trabajo. El quinto, Isaías, un trabajador cuya familia tuvo que venir a Euskadi huyendo de la persecución franquista. Hoy ha sido Juan Manuel, un trabajador que vino a Alava a sumar puntos para que le destinaran cuanto antes a su ciudad de residencia, Málaga. Todos, trabajadores. Todos, asesinados por ETA.

Y es curioso. Sus voceros, ANV y compañía, se presentan como los grandes defensores de los trabajadores cuando hablan de siniestralidad laboral, de medio ambiente, de impuestos… En cambio, cuando sus amigos de ETA asesinan a un trabajador, silencio total. Con esa actitud, ¿quién os va a creer? ¿Cómo vais a defender a los obreros si no defendeis su derecho fundamental, como es el derecho a la vida?

No me creía vuestras mentiras hace un año, y no me las creo ahora. ¡FARSANTES! Eso si,  llamareis a los demás fascistas, carceleros y un montón de cosas más. Pero aquí los que matan son vuestros amigos, y los que calláis sois vosotros. Ya lo dijo Anguita y yo me voy a permitir parafrasearle: malditos sean los terroristas y los hijos de puta que les apoyan.

Mañana, 15 de mayo, se celebrarán las concentraciones habituales convocadas por Gesto por la Paz.

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Un silencioso grito

Esta mañana había que estar en la concentración ante el Ayuntamiento, y ahí estábamos. Me ha impactado el silencio: durante un cuarto de hora no se oía más que a los pájaros. Como si ellos también se hubieran concentrado allí para manifestarse contra ETA.

En silencio todos hemos gritado lo mismo: lo que ayer dijeron Don Ricardo, Pablo y yo; lo que hoy ha dicho Sandra Carrasco. Y no me refiero solo al llamamiento a votar mañana.

Así he visto y oido hoy la concentración ante el Ayuntamiento de Gasteiz.

Repito lo que dije en diciembre: espero que cada alcaldía de ANV vaya cayendo a partir del lunes, una a una, gracias a las mociones de censura de los partidos democráticos. El respeto a la vida está por encima de cualquier programa electoral.

Por cierto, un saludo a Maripuchi, a la que he conocido hoy en la concentración.

Cada voto será un si a la Democracia y un no a ETA

ETA cierra su campaña electoral de la única forma que sabe: matando a una persona. Isaías Carrasco era un trabajador, sin escolta, sin medidas de protección. Un blanco fácil. Por eso han ido a por él. Isaías había sido hasta hace menos de un año concejal del PSE en Arrasate.

ETA le ha asesinado delante de su mujer y de su hija dos días antes de las elecciones generales. Sin duda quieren imitar a Bin Laden, y su atentado de Madrid hace 4 años. ¿Quién les ha dicho a estos animales que matando trabajadores se trabaja por el progreso de Euskadi?

Sobre ETA ya he hablado en varias ocasiones. Su acto terrorista de hoy no hace sino confirmar aún más lo que ya he dicho de ellos y de sus amigos: que son unos cobardes, y alguna cosa más.

La campaña electoral ha finalizado. Desgraciadamente, tendremos una larga jornada de reflexión de 32 horas, y no de 24. La mejor respuesta es que el domingo vayamos a nuestro colegio electoral y ejerzamos libremente nuestro derecho al voto. Ahora más que nunca. Las instituciones democráticas son el único medio para avanzar. Y todas las opciones ideológicas estarán representadas en las papeletas: la izquierda, el centro, la derecha, el nacionalismo vasco, gallego, español o cántabro,  el independentismo, el federalismo,…; todas van a estar. Cada voto es un si a la Democracia, un no a ETA.

Aprovecho también para mostrar mi solidaridad con el PSE y todos los socialistas vascos que hoy han perdido a un compañero.

¡COBARDES DE MIERDA!

Es lo más suave que se me ocurre para poner en el título de este artículo, que escribo poco después de enterarme de un nuevo asesinato de ETA. Porque lo que ha ocurrido hoy no es más que la prueba de una infinita cobardía: la de no querer aceptar las reglas del juego, la de hacer trampas. Pero precisamente es haciendo trampas como seguiréis perdendo la partida. Llevais 40 años haciendo trampas, ¿qué habéis conseguido?. Bueno, si, mancharos las manos con la sangre de más de 800 muertos. Pero, ¿aparte de eso? Solo sufrimiento y cadenas con las que atais a todo un Pueblo que no os aguanta más.

Y qué decir de las marionetas de ETA. Hoy callan. Seguramente el atentado